La alimentación vegetariana en la etapa infantil
Existen varias teorías sobre la alimentación infantil vegetariana. Una de ellas es que no es recomendable para los niños, pero lo cierto es que todavía hoy existe mucha desinformación sobre qué significa exactamente ser vegetariano y cómo afecta a los pequeños de la casa.
Según sea una dieta más o menos estricta, dentro de este tipo de alimentación, hay diferentes clases: vegano, semivegetariano, vegetarianolacto… En general, se entiende por una alimentación vegetariana aquella en la que se prescinde de la carne procedente de los animales, aunque sí se consumen sus derivados.
Alimentos prohibidos en la etapa infantil
Los mejores alimentos en la etapa infantil
La pregunta que la mayoría de las familias se hacen entorno a la alimentación infantil vegetariana es ¿un niño que no come carne está bien alimentado? La verdad es que siempre y cuando la dieta está bien diseñada y tome todos los nutrientes necesarios como hierro, calcio, vitamina B12, vitamina D… su crecimiento será normal. Lo importante no es que un niño coma carne o pescado, sino que lleve una dieta sana y equilibrada.
La única dieta que no se recomienda para los más pequeños es la vegana. No sólo no consume carne, sino tampoco ningún alimento de origen animal, es decir, ni leche, huevos, queso, miel… El problema de esta alimentación en la etapa infantil es que sería muy difícil que el niño recibiese todos los aportes que necesita para su correcto desarrollo y crecimiento.
Para que una alimentación infantil vegetariana sea saludable, debe ser equilibrada y rica. La clave reside en equilibrar la relación entre las proteínas, grasas e hidratos de carbono y las necesidades del organismo de cada niño, con el consumo de frutas, vegetales, legumbres y frutos secos.
Las razones por las que se opta por una alimentación infantil vegetariana son muy diversas. Muchas familias lo hacen porque aporta beneficios para la salud, otros promovidos por el respeto a los animales y al medio ambiente… Sí es importante, especialmente en el caso de personas con alguna enfermedad, embarazadas y niños, que la dieta esté diseñada por un nutricionista para asegurar que recibe la cantidad diaria de nutrientes que necesita.