¿Qué es una "mamá almendra" y cómo no serlo?

En TikTok circula un nuevo estilo de crianza. Y, a diferencia de la "paternidad scrunchy" (un equilibrio entre la paternidad natural "crujiente" y la moderna "sedosa"), no es algo que se pueda probar en casa. Se llama "paternidad almendrada" y se ha hecho viral gracias a unos vídeos que han vuelto a aparecer de Yolanda Hadid, ex de Real Housewives of Beverly Hills, hablando con su hija Gigi, entonces adolescente y ahora supermodelo.

"Me siento muy débil. Me comí como media almendra", le dice Gigi a su madre.

Yolanda responde con un consejo inspirado en la cultura dietética: "Toma un par de almendras y mastícalas muy bien".

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Vaya. Así que, básicamente, las "madres de la almendra" dan consejos de alimentación poco saludables, pero desgraciadamente comunes, que realmente necesitan volver al siglo XX, donde en realidad nunca pertenecieron en primer lugar.

El consejo es perjudicial, como compartieron otros TikTokers.

"Me alegro de que estemos llamando la atención [a las madres almendristas] en esta aplicación", dice una TikToker llamada Dra. Karla, que publica como @imecommunity y dice ser pediatra. "Esta es una tendencia realmente preocupante. Es realmente dañina... tiene sus raíces en la cultura de la dieta, los prejuicios internalizados, la gordofobia, la proyección, la búsqueda del privilegio de la delgadez, y no en la salud."

Es un trabalenguas, pero la Dra. Karla no se equivoca.

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Otra madre, Charlene Johnson, dice que se sintió aliviada cuando escuchó los comentarios de Yolanda porque ella nunca hacía comentarios sobre el peso de su propia hija. Pero luego, hizo una autorreflexión y se dio cuenta de que ella podría haber sido un tipo diferente de "mamá almendra".

"Creo que definitivamente hay dos tipos de madres almendra", dice Johnson en un vídeo que ha sido visto casi 24,5K veces. "Está la mamá almendra que hacía comentarios sobre su propio cuerpo, su propia imagen corporal y la de su hija... y todo giraba en torno a estar delgada... y luego está la mamá almendra light".

Johnson admite que crió a sus hijos durante el apogeo de la cultura de las dietas y sabe que ellos vieron cómo lo llevaba ella.

"Por mucho que intentara que mis hijos comieran lo que quisieran, que nunca hablara de sus cuerpos, que nunca hablara de mi propio cuerpo delante de ellos, seguían observando lo que yo hacía", dice Johnson, una antigua instructora de fitness que dijo que sería más comercial si perdiera peso. "Lo que hacía era hacer ejercicio durante horas al día. Nunca comía lo que ellos, y era [fanática] de comer limpio".

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Johnson se ha alejado de la industria y recuerda a los padres que no son perfectos. Pero su vídeo demuestra que nuestra relación y nuestros comentarios sobre la comida y la imagen corporal afectan a nuestros hijos.

 

Los expertos comparten que la alimentación sana empieza en casa durante la infancia e implica mucho más que lo que aparece en una etiqueta nutricional. Para fomentar estos hábitos, los expertos sugieren a padres y cuidadores:

• Evite avergonzar a los alimentos. Etiquetar ciertos alimentos como las verduras como "buenos" y las galletas como "malos" puede hacer que los niños sientan que sus hábitos alimentarios les definen como "buenos" o "malos". En lugar de decir "cómete las zanahorias", prueba con "los alimentos de color naranja fortalecen el sistema inmunitario". ¿Su hijo quiere una galleta? Pruebe: "El azúcar te da energía, pero las galletas no están en el menú de esta noche. Podemos comerlas mañana. ¿Qué tipo te apetece?".
• Los instrumentos de medición de la masa corporal son especialmente problemáticos porque se basan en la raza y se centran en las personas blancas. Y, en general, centrarse en el número de la báscula puede desencadenar una alimentación desordenada. En lugar del peso, intente ayudar a su hijo a centrarse en cómo el movimiento y el consumo de pescado y verduras le dan más energía y liberan endorfinas.
• Los expertos afirman que los niños que ayudan a cocinar y hornear son menos quisquillosos. Les ayuda a aprender más sobre los ingredientes y les permite ayudar, y puede ser una experiencia que les una.

Los expertos sugieren que dar ejemplo de moderación, como comer productos y proteínas -y también algún capricho-, también puede ayudar a los niños a crear hábitos alimentarios realmente saludables y sostenibles. Si le preocupan los hábitos alimentarios de su hijo, hable con un médico o profesional de la salud mental.