5 consejos para reducir el estrés de la paternidad
El estrés parental es la angustia que se experimenta cuando las demandas superan a los recursos. Factores externos e internos, como el sueño, el apoyo social, el temperamento de los niños y las condiciones económicas, pueden poner a prueba las relaciones, la paciencia y el bienestar familiar. Para reducir el estrés, tenemos cinco consejos que le ayudarán.
1. Reconoce que tus sentimientos son válidosSea lo que sea lo que sientas, ya creas que es irracional (o que alguien te lo dice), dramático o simplemente "la vida de mamá" y tienes que "aguantarte", ¡detente ahí!
Estos sentimientos no deben despreciarse. No te conformes con seguir adelante. Te mereces sentirte menos estresado y tu familia necesita que estés menos estresado.
2. Entender por qué es importante reducir el estrésLos consejos virales de un padre para reducir el estrés de la crianza en solitario
Consejos para controlar el estrés en el embarazo
Los niños pequeños perciben cuando sus padres están estresados, y su comportamiento lo refleja, creando un círculo vicioso de estrés. Reducir el estrés de los padres es importante para toda la familia.
3. Identifique la fuente o fuentes específicas de su estrésIdentifique la fuente principal de estrés en su vida y trátela en primer lugar; las posibles fuentes incluyen cólicos, un recién nacido/niño pequeño/gemelos, falta de sueño, trabajar desde casa con niños pequeños, un niño pequeño que experimenta grandes sentimientos, problemas de pareja o preocupaciones económicas.
4. Trabaja en la solución de tu estrés parentalBusca apoyo emocional y social para crear tu propia aldea. Busca actividades locales para mamás y bebés, apoyo a domicilio y contactos de apoyo y asesoramiento profesional. Busca alternativas a los estresantes métodos de entrenamiento del sueño o reserva una consulta. Habla con tu médico de cabecera sobre cualquier problema de salud y busca asesoramiento sobre relaciones o finanzas.
5. Incorpora pequeños hábitos antiestrés a tu día a día- Respira profundamente cada mañana.
- Empieza el día con un trago de agua caliente con limón o jengibre.
- Elige una afirmación que te haga sentir bien y repítela a lo largo del día. Aquí tenemos 20 para elegir.
- Ten a mano tentempiés nutritivos, tanto para ti como para tu hijo, y no olvides llevarlos en el bolso para evitar los "resfriados".
- Mímate cada día con algo que sea sólo para ti y que te haga feliz.
- Si la hora de acostarte con tus hijos te resulta estresante, ponte unos auriculares y escucha una meditación o un podcast.
- Escribe listas para sentirte organizada y al mando de la vida. Si tienes pareja, no tienes por qué soportar esa carga mental tú solo. Aquí te explicamos cómo compartir las responsabilidades parentales.
- El cuidado personal no tiene por qué ser complicado ni añadir nada más a tu día a día. Aquí tienes nuestra lista de acciones sencillas que te alegrarán y te llenarán el vaso. Además, puedes hacerlas sin tener que estar sin niños, si eso no es una opción.