7 líneas únicas para usar al disciplinar a los niños
Como padres, todos tenemos una bolsa de trucos. La mejor herramienta en la mía ahora mismo no es el soborno o alguna sofisticada filosofía de crianza, es la única línea. En un esfuerzo por validar los sentimientos de nuestras hijas y ser empáticos, mi marido y yo solíamos hablar demasiado. Explicábamos, persuadíamos e intentábamos razonar con Penny, de 7 años, y Gwen, de 4, pero esas largas conversaciones sólo conducían a luchas de poder y agotaban a todos los involucrados.
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Hemos curado un puñado de frases breves para reemplazar una tonelada de tonterías, y ha mejorado salvajemente nuestras interacciones con nuestros hijos. Tal vez estas frases de nuestra casa, de otros padres y de los expertos hagan magia para usted también.
"Lo sé, es difícil".Esta línea, emparejada con una cara ceñuda sincera y una palmada en el hombro, puede ayudar mucho a calmar a un niño que tiene grandes emociones, porque reconoce que, sí, apesta cuando su calcetín está "mal". La validación puede ayudar a su hijo a pasar por sentimientos difíciles en lugar de quedarse atascado, dice el Dr. Ershler.
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Darle a un niño pequeño una dirección positiva puede terminar un debate más rápido de lo que podría hacerlo el razonamiento. "Cuando usted dice '¡No corras!' o 'Deja de discutir', su hijo no sólo tiene que detener la acción, sino que también tiene que buscar en su repertorio de respuestas qué hacer a continuación", dice el Dr. Ershler. Pero "¡Camina, por favor!" o "Di '¡Está bien, mami!' " simplemente le dice qué hacer a continuación.
"Inténtalo de nuevo".Este es un gran atractivo para muchos tipos de comportamiento no deseado: gritar, agarrar un juguete de alguien, ser grosero. Los niños pueden ser más cooperativos si sienten que tienen algún control sobre la situación, así que decir algo como esto o "Intentémoslo de nuevo" les da la oportunidad de elegir comportarse de manera diferente sin acumular la culpa.
"¿Qué dije?"La forma de decir esto es super importante porque si no tienes cuidado, puede sonar como una regañina. Y si tus emociones se intensifican, también lo harán las de tu hijo. Pero pedirle genuinamente que te diga lo que has dicho es una buena manera de recordarle lo que se supone que debe hacer.
"Te quiero demasiado para discutir."Mi propio momento eureka de "mantenerlo simple" llegó el día que escuché estas siete palabras. En la entrega, el director del preescolar de Gwen apagó instantáneamente y amablemente los intentos de un niño de 4 años de regatear con ella respondiendo con esta gema. Y punto. Caso cerrado. Muévete, niño, y eso es exactamente lo que hizo.
- "¿Cómo se pregunta?"
Hacer que los niños recuerden sus modales es una batalla continua, pero en lugar de regañar, lo que puede desencadenar una respuesta rebelde, ayude a su hijo a recordar las reglas con una pregunta tranquila.
Revista de los padres
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