¿Cómo elegir tu centro de maternidad?
Decidir en qué centro dar a luz es a veces una decisión difícil, especialmente, si es nuestro primer bebé. Elegir un centro público o privado sólo dependerá de ti. Te contamos los aspectos que consideramos debes tener en cuenta para elegir tu centro de maternidad.
Conocer a algún médico o persona cercana es siempre la mejor opción a la hora de tomar una decisión. Si no es tu caso, guíate de tu instinto según tus preferencias. Cuanto más sepas del hospital o clínica privada que vas a elegir, mucho mejor: cuáles son sus protocolos, experiencia en partos, equipamiento, profesionales… Además, también existen otros detalles secundarios que tal vez resulten imprescindibles para tu comodidad como el horario de visitas, la cama del acompañante o las características de la habitación.
Cómo elegir tu centro de maternidad
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También es importante tener en cuenta cómo te gustaría dar a luz, dentro de que debes considerar que hay variables que son imposibles de controlar, pero si bien es cierto, que en algunos centros tienes más libertad para elegir que en otros. Además del momento del parto, saber si vas a querer dar lactancia en exclusiva durante los primeros seis meses puede ayudarte a tomar la decisión a la hora de elegir tu centro de maternidad, pues no todos los hospitales o clínicas apoyan esta decisión.
Desde hace algunos años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF han lanzado la Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia (IHAN) con el objetivo de animar a hospitales, servicios de salud y salas de maternidad a adoptar las prácticas que protegen, promueven y apoyan la lactancia materna en exclusiva desde el nacimiento y humanizan el momento del parto.
Para poder ser un centro sanitario IHAN los hospitales deben cumplir, entre otros, con los siguientes requisitos:
- Cumplir los diez pasos para una feliz lactancia natural:
- Disponer de una normativa escrita de lactancia que se ponga en conocimiento de todo el personal.
- Capacitar a los profesionales de la salud para que puedan poner en práctica dicha normativa.
- Informar a todas las embarazadas acerca de los beneficios y manejo de la lactancia.
- Ayudar a las madres a iniciar la lactancia en la media hora siguiente al parto, es decir, colocar a los bebés en contacto piel con piel inmediatamente después de dar a luz al menos durante una hora y alentar a las madres a reconocer cuando sus bebés necesitan amamantar.
- Mostrar a las mamás cómo dar el pecho e incluso mantener la lactancia, aunque tengan que separarse de sus hijos.
- No dar a los recién nacidos ningún otro alimento o bebida que no sea leche materna.
- Permitir que madre e hijo permanezcan juntos las 24 horas del día.
- Alentar a las mamás a dar el pecho a demanda.
- No dar a los niños ninguna tetina ni chupete.
- Fomentar la asistencia a los grupos de apoyo una vez recibida el alta.
- Tener al menos un 75% de lactancia materna exclusiva desde el nacimiento hasta el alta.
- Ofrecer una asistencia al parto acorde con la Estrategia de Atención al Parto Normal del Sistema Nacional de Salud.
- Cumplir el Código de Comercialización de Sucedáneos de leche materna y las resoluciones posteriores de la Asamblea Mundial de la Salud (AMS).
En España existen un total de 92 hospitales adheridos a esta iniciativa. En la Comunidad de Madrid son: el hospital universitario Puerta de Hierro en Majadahonda, el hospital 12 de octubre, y el hospital de Fuenlabrada. Para conocer los hospitales de otras provincias, puedes consultar la página web y verás toda la información que necesitas saber al respecto.
Por otro lado, algunos hospitales como por ejemplo La Paz en Madrid, ofrecen la posibilidad de visitar la sala de partos y las habitaciones de maternidad, además de explicarte en una charla informativa con médicos del hospital cómo funciona y en qué consiste la epidural. Disponer de todos estos datos y conocer de primera mano cómo son las salas de maternidad, aporta mayor seguridad a la hora de tomar la decisión. Piensa que también debes elegir el centro en función del tipo de parto que quieras tener, por ejemplo, no todos los hospitales o clínicas, permiten el parto en el agua.
En este sentido, también debes considerar que, aunque tengas tu idea elaborada de cómo quieres que sea tu parto, hay aspectos que no se pueden controlar. Por ejemplo, es posible que tengas claro que quieres usar la epidural, pero puede darse el caso de que llegues al hospital con demasiados centímetros de dilatación y ya no tenga sentido utilizarla. O bien, puede pasarte todo lo contrario, que tengas claro que no quieres epidural, pero de repente ese día te molestan tanto las contracciones que sí la solicitas a los médicos. Con esto quiero decir que vayas relajada, que asimiles que no todo lo puedes controlar y que al final te pondrás en manos de profesionales que querrán lo mejor para ti y tu bebé.
Lo verdaderamente importante antes de elegir tu centro de maternidad es poner en orden tus prioridades. Por eso es bueno que te preguntes, ¿queremos un parto natural? ¿Preferimos la seguridad de un gran hospital o la privacidad de una clínica privada? ¿Queremos que nuestra pareja nos acompañe en todo momento? ¿Mi embarazo ha sido un embarazo de riesgo? ¿Cuál es la distancia hasta el hospital? ¿Qué es para mi lo más importante? ¿Cuáles son los requisitos imprescindibles que debe tener el centro que elija? En tus respuestas tendrás la solución.