Masaje uterino: Lo que las nuevas mamás deben saber
Independientemente de cómo haya llegado su bebé al mundo, por cesárea o por vía vaginal, con epidural o sin ella, el masaje uterino o del fondo uterino puede ser una parte integral de su "recuperación" inmediata tras el parto para controlar la involución uterina, que es el proceso por el que el útero vuelve a su estado anterior al embarazo. Entonces, ¿cómo realizará la enfermera el masaje uterino y si es necesario?10
Contenido rápido
¿Qué es el masaje uterino?
El masaje uterino o del fondo uterino es el roce desagradable de su útero. Con una mano estabilizando el útero en el hueso púbico, la enfermera o el obstetra utilizará la otra para ejercer presión hacia abajo y hacia dentro sobre el estómago para frotar con firmeza el fondo uterino o la parte superior del útero. Esto hará que los músculos uterinos se contraigan y el útero se ponga firme.2
La contracción muscular del útero inicia la involución uterina, es decir, el proceso por el que el útero dilatado vuelve a su tamaño y posición previos al embarazo. La involución uterina comienza inmediatamente después del parto y ayuda a controlar la hemorragia que suele acompañar al parto.2,8
En la actualidad, el masaje uterino se considera parte de la gestión rutinaria de los cuidados posparto. Es una experiencia con la que probablemente se encontrarán casi todas las madres puérperas, especialmente si dan a luz en un hospital.1
Razones para un masaje uterino
A medida que la placenta se desprende de la pared uterina, las arterias espirales del útero que alimentan la placenta quedan expuestas y sangran. Las arterias espirales son únicas porque no tienen musculatura que las ayude a contraerse de forma independiente.11
El útero debe contraerse para comprimir estas arterias y detener el flujo sanguíneo desde el lugar donde antes se adhería la placenta. La liberación natural de oxitocina provocará la contracción del útero. En ocasiones y por diversos motivos, el útero puede estar "atónico" o demasiado relajado después del parto. Un útero relajado o atónico después del parto provocará un aumento de la hemorragia. En este caso, el masaje uterino estimula la contracción del útero y puede controlar la hemorragia.2,6
El masaje uterino es una herramienta excelente para extraer los coágulos sanguíneos que pueden restringir la contracción uterina, evaluar la hemorragia posparto y supervisar la involución uterina. El masaje uterino se utilizará junto con otras intervenciones médicas si la hemorragia es significativa.2
¿Cuándo se realizará?
Su proveedor puede realizar un masaje uterino inmediatamente después del nacimiento de su bebé, antes o después de la expulsión de la placenta. Las dos horas siguientes al parto son fundamentales para controlar la firmeza del útero y evaluar la hemorragia vaginal. Durante este tiempo, el masaje uterino puede realizarse tan a menudo como sea necesario, generalmente cada 10 ó 15 minutos, para garantizar un fondo uterino firme y una hemorragia posparto adecuada.1
Una vez finalizado el trabajo de parto y la recuperación del parto, la enfermera sólo podrá realizar masajes uterinos cada 12 horas, a menos que sea necesario un masaje más frecuente o nuevas intervenciones por hemorragia activa.
¿Qué es una hemorragia posparto?
Es difícil hablar del masaje uterino sin abordar brevemente la hemorragia posparto. La hemorragia posparto (HPP), o hemorragia grave después del parto, es una causa importante de enfermedad y muerte materna durante el parto. La contracción uterina ineficaz tras el parto es responsable del 75% de los casos de HPP.1,6
Toda madre embarazada corre el riesgo de sufrir una hemorragia posparto. La HPP se define como una pérdida acumulada de sangre mayor o igual a 1.000 mililitros o una pérdida de sangre acompañada de signos o síntomas de hipovolemia en las 24 horas siguientes al parto.3,12
El masaje uterino puede ayudar a la contracción de un útero relajado o extirpar un coágulo de sangre que impida la contracción del útero. Pero no es el tratamiento de primera línea para las hemorragias posparto importantes.1
¿Qué se siente durante un masaje uterino?
El masaje uterino no es una experiencia cómoda. La presión para frotar el útero puede variar en función de quién realice el masaje. Las molestias pueden variar desde un doloroso calambre menstrual hasta el dolor de una fuerte contracción.
Si se sospecha de hemorragia o coágulos sanguíneos, puede utilizarse un masaje uterino más agresivo para contraer el útero a propósito. Si el fondo uterino permanece firme y la hemorragia es estable después del parto, el masaje uterino puede ser más suave para garantizar que el útero permanece contraído.6
En algunos estudios, el masaje uterino y la micción frecuente han reducido los dolores posteriores al parto o los calambres posparto. El vaciado frecuente de la vejiga permite al útero disponer de más espacio para contraerse con eficacia. Esta técnica puede disminuir la necesidad de tomar analgésicos para controlar las molestias de los dolores posteriores.7
El masaje uterino después del parto o masaje del fondo uterino se realiza de forma rutinaria como seguro contra un útero "empantanado". Es una intervención gratuita, segura, eficaz y fácil de realizar. Así que, cuando la enfermera entre en la habitación para su frecuente "masaje", acurruque a su pequeño, respire a pesar de las molestias y sepa que son temporales.