8 formas prácticas de mantener a los bebés frescos en un día caluroso

Los bebés no pueden regular su temperatura corporal, así que, aunque no puedan decirte que tienen demasiado calor y están incómodos, normalmente te lo harán saber de otras maneras. El mal humor, la humedad en el cuello o en el pelo, las mejillas sonrojadas y el deseo de comer más son señales de que sienten el calor.

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Aquí tienes 8 formas prácticas de mantener a los bebés frescos en un día caluroso:

1. Juegos de agua

Mete a tu pequeño en un baño tibio, o métete con él para que juegue y chapotee. O dale un pequeño cuenco de agua y algunos juguetes para que juegue, o ponle en una pequeña piscina infantil a la sombra. Utiliza paños húmedos para limpiarles regularmente a lo largo del día.

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2. Mantén la hidratación

Dale el biberón o el pecho a demanda para asegurarte de que mantiene los líquidos, y si tu bebé tiene más de 6 meses, ofrécele sorbos de agua hervida fría. Es posible que te hayan dicho que puedes darle una toallita húmeda congelada o un helado para bebés (normalmente compuesto por leche materna o puré de fruta), pero algunos médicos lo desaconsejan porque el hielo puede romperse en grandes trozos, lo que supone un peligro de asfixia, y el contacto directo puede llegar a dañar sus labios y encías.

3. Ve a un lugar fresco

Si en tu casa hace calor, o simplemente necesitas un cambio de aires, dirígete a la biblioteca, museo, galería, cafetería o centro comercial con aire acondicionado más cercano. Y también cómprate una bebida fresca.

4. Utiliza tejidos transpirables

Deja a tu bebé sólo con pañales o ponle ropa ligera de algodón. Asegúrate de que su ropa de cama también sea de fibras naturales para las siestas y las noches. Consulta nuestro artículo "Cómo elegir la solución de descanso TOG adecuada para tu bebé" para obtener una guía sobre qué ponerle para dormir.

5. Refresca su entorno de sueño

Mantén las cortinas cerradas durante el día en tu dormitorio o en la habitación del bebé para mantenerlo fresco. Si no tienes aire acondicionado, deja una ventana abierta si la brisa es fresca, o utiliza un ventilador que apunte hacia fuera de la cama de tu bebé. La temperatura ideal oscila entre los 16 y los 20 grados, por lo que es conveniente utilizar un termómetro de habitación para asegurarte de que no hace demasiado calor.

6. Evita las horas más calurosas del día

Intenta salir a primera hora de la mañana a pasear con ellos o al atardecer, cuando hace menos calor, y quédate en casa entre las 10 y las 16 horas, cuando el índice de UV es alto. Intenta permanecer a la sombra si tienes que salir a esa hora.

7. Cuelgue sábanas húmedas

Este es un gran truco para refrescarse si no tienes aire acondicionado. Empapa unas sábanas o toallas en agua fría, escúrrelas y cuélgalas frente a las ventanas o cerca de los ventiladores. Otra idea es utilizar cuencos con hielo cerca de los ventiladores.

8. Proteger contra el sobrecalentamiento

Los bebés corren un riesgo mucho mayor de sufrir un sobrecalentamiento, un golpe de calor y un SMSL porque su temperatura corporal puede aumentar mucho más rápido que la de un adulto. Se recomienda no cubrir los cochecitos ni las cápsulas ni siquiera con una muselina, y no dejar nunca al bebé solo en el coche ni siquiera un minuto.

Recordatorio: Tú conoces a tu bebé, así que haz caso a tu instinto si crees que tu bebé se encuentra mal debido al calor. Acuda inmediatamente al médico.