¿Cuántas siestas necesita mi bebé?

Ah, la hora de la siesta... Es uno de los momentos más tranquilos del día para los más pequeños, y uno de los más importantes. ¿Sabías que las horas que tu hijo pasa durmiendo no sólo le rejuvenecen para el resto del día? El sueño también afecta a su estado de alerta, su pensamiento cognitivo, su capacidad de atención, su estado de ánimo, su aprendizaje y su memoria.

Esas horas de sueño diurnas también ayudan a tu hijo a dormir más tiempo por la noche. Los estudios también sugieren que el sueño influye en el crecimiento de los bebés y favorece el desarrollo de la memoria, la capacidad de atención y las habilidades motoras de los niños pequeños. Y tú pensabas que tu bebé sólo tenía dulces sueños. Con beneficios tan importantes como éstos, ¿qué padre no querría tener un hijo bien descansado? Por eso es importante que los padres ayuden a sus hijos a dormir bien. Empecemos por lo básico.

Sólo porque tu hijo empiece a saltarse alguna siesta por la mañana o por la tarde a los 12 meses, no pases inmediatamente a la siesta única. Según Harvey, tu pequeño tendrá más posibilidades de pasar a una sola siesta si esperas a que tenga entre 14 y 19 meses y muestre uno de los siguientes cambios de hábito:

¿Cuántas horas necesita dormir su bebé?

Tu guía para las dichosas siestas del bebé: 6-12 meses

• Saltarse la siesta nº 1 o la nº 2, o ambas.
• Tener batallas a la hora de acostarse cuando antes no las tenía.
• Se despierta con más frecuencia por la noche.

"El mayor error que cometen los padres en este momento es alternar entre dos siestas y una", dice Harvey. Los signos de que el bebé aún necesita su siesta matutina son:

• Actuar con sueño durante el día
• Ser agresivo, impaciente o hiperactivo
• No querer salir de la cama por la mañana
• Actuar de forma irritable a última hora de la tarde

Si su hijo presenta alguno de estos síntomas, intente cambiar su horario de siesta o de acostarse. Despiértalo antes por la mañana o acorta su siesta para que tenga sueño por la noche. (Una buena regla es que haya cuatro horas entre la siesta de la tarde y la hora de acostarse).

Pero no acorte demasiado la hora de la siesta o su hijo estará demasiado cansado para dormirse por la noche. Los niños bien descansados se duermen más fácilmente por la noche. Experimentando con varios horarios de sueño, establecerás el horario que mejor funcione para tu hijo. Ten paciencia. Esto puede llevar semanas.

Los niños de 1 a 2 años deben dormir entre 11 y 14 horas al día. Si duermen dos siestas al día, pueden durar entre 30 y 90 minutos cada una. Una vez que pasan a dormir una siesta al día, la siesta puede durar hasta tres horas.

"Una vez que el niño supera los 14 meses de edad, puede pasar oficialmente a un horario de una sola siesta", dice Harvey. "La clave del éxito es reducir gradualmente la diferencia entre la siesta de la mañana y la de la tarde".

Por ejemplo, si la siesta matutina comienza alrededor de las 11 de la mañana, retrase la hora de inicio 15 minutos cada tres o cinco días hasta que la siesta comience a las 12:30. En ese momento, su hijo debería abandonar totalmente la siesta matutina. Compense la pérdida de la primera siesta con una hora de acostarse más temprana -al menos 30 minutos antes- hasta que su hijo se adapte al nuevo horario.

• Día 1: Comienza la siesta a las 11 de la mañana.
• Días 2-6: Comienza la siesta a las 11:15 a.m.
• Días 7-11: Comienza la siesta a las 11:30 a.m.
• Días 12-16: Empezar la siesta a mediodía.
• Días 17-21: Empezar la siesta a las 12:15 horas.
• Días 22-26: Comienza la siesta a las 12:30 horas.
• Día 27: Tu hijo debería estar listo para dejar la siesta de la mañana.

"Esta es la mayor transición por la que va a pasar tu bebé en lo que respecta al sueño", dice Harvey. "Es un proceso de cuatro a seis semanas. Tómate tu tiempo y procede a un ritmo con el que te sientas cómodo".

Para ayudar a tu hijo a adaptarse a su nuevo horario de sueño, haz cambios en su habitación para favorecer el sueño. Aquí tienes tres trucos que pueden ayudarte.