Cómo un artista del tatuaje ayudó a un adolescente con dislexia que está aprendiendo a conducir
Cuando Amanda Morris, una madre de Kentucky, estaba ayudando a su hija Alexis a aprender a conducir, sus preocupaciones iban más allá de la ansiedad normal de los padres.
En un esfuerzo por facilitar la vida cotidiana, Morris cuenta que Alexis, de 16 años, dibujaba "muy a menudo" una "L" en la mano izquierda y una "R" en la derecha.
"Ha querido (algo más permanente) desde que era pequeña", dice Morris.
Esta adolescente escribió un libro sobre lo que sintió cuando deportaron a su madre a México
Un nuevo estudio revela que esta sencilla técnica ayuda a dormir a un bebé que llora
Con su hija al volante, Morris aceptó y empezó a ponerse en contacto con tiendas de tatuajes locales, pero incluso un diseño sencillo tenía un precio elevado.
"Había llamado a muchas tiendas y todas me dijeron que costaría entre 100 y 150 dólares, lo que me pareció ridículo", dice Morris.
Pero entonces encontró Ambitious Ink, propiedad de Scotty Jr. Thompson, en Frankfurt, Kentucky, y le envió un mensaje.
"Mi hija tiene 16 años y sufre dislexia severa y no distingue la izquierda de la derecha, así que quiere una L pequeña en la mano izquierda y una R pequeña en la derecha", escribió Morris a Thompson. "En todos los sitios a los que llamo me cotizan entre 100 y 150 dólares. ¿Por cuánto lo harías?"
"¿Qué tal gratis?", respondió el tatuador, de 30 años, a la suplicante madre.
"Me enorgullezco de ser el tatuador del hombre corriente", dice Thompson. "Crecí sin tener 200 dólares extra para gastarme en un tatuaje, así que cuando vi a su madre decir que acababa de sacarse el permiso y le costaba diferenciar... supe que se lo iba a regalar".
"Cuando llegamos allí mi hija estaba nerviosa, pero Scotty estuvo increíble", dice Morris. "La guió paso a paso por todo lo que iba a hacer e incluso le preguntó muchas veces si estaba segura de que eso era lo que quería".
El resultado final fueron dos pequeños diseños que marcan una gran diferencia para Alexis.
"Mientras la tatuaba, Scotty no paraba de preguntarle si estaba bien y si le gustaba", dice Morris. "No podemos decir suficientes cosas buenas de Scotty y del entorno".
Thompson compartió en un post de Facebook ahora viral que el tatuaje se completó "gratis y un abrazo".
"Así es como sabes que una empresa quiere y aprecia a sus clientes. Esto es increíble", escribió un usuario.
Otro añadió: "Este tipo de cosas me devuelven la fe en la humanidad".
"Me hizo pensar que mi propósito en la tierra es mucho más grande que tatuar y ganar dinero", dice. "Quiero ayudar a la gente a curarse".
