La lucha por la lactancia materna es real

Si la lactancia fuera tan sencilla como alimentar a un bebé hambriento con los pechos de su madre. Aclarar y repetir. Es mucho más que eso. Si tienes problemas con la lactancia materna, no estás sola y no es culpa tuya.

Publicidad

Oímos hablar mucho de lo maravillosa que es la lactancia materna, de sus múltiples beneficios y de los consejos sobre cómo llevarla a cabo con éxito. Pero, a menudo, las madres sienten que es algo que tienen que hacer solas, sobre todo porque debería ser algo natural para una madre, ¿verdad?

Sin embargo, ese no es el caso. La lactancia no es algo natural para muchas personas. Es una habilidad que hay que aprender y que requiere conocimientos, tiempo, paciencia y, sobre todo, apoyo.

Por qué es tan importante la Semana Mundial de la Lactancia Materna

Un proyecto fotográfico capta cómo es realmente la lactancia materna

¿Te sientes identificada con alguna de estas afirmaciones?

• La lactancia materna no es para mí.
• Lloro la mayor parte del día porque la lactancia es dura y agotadora.
• No puedo seguir dando el pecho.
• Creo que los problemas de sueño de mi bebé se deben a que quiere la teta toda la noche.
• Mi bebé no está ganando suficiente peso, así que me preocupa no estar produciendo suficiente leche.
• Me siento muy incómoda dando el pecho en público, así que me quedo en casa.
• Dar el pecho es doloroso y he probado de todo para calmar mis pezones doloridos.
• Me siento muy afectada y abrumada; necesito un descanso.
• No me gusta dar el pecho pero sigo haciéndolo por culpa de mi bebé.
• Quiero dejar de dar el pecho pero me da miedo que me juzguen.
• Mi bebé sólo se duerme al pecho y me preocupa que no aprenda a dormirse solo.
• Lo he intentado todo para aumentar mi producción, pero nada funciona. Me siento tan frustrada y derrotada.
• Tengo un trauma en el pasado con respecto a que me toquen los pechos, así que siento emociones incómodas cuando doy el pecho.
• La realidad de la lactancia no se parece en nada a lo que esperaba, lo que me hace sentir triste.
• Realmente quería dar el biberón, pero me sentía presionada por la familia, la sociedad y los profesionales de la salud para que diera el pecho.

Lo más importante que necesita una madre lactante en este momento

Estas luchas por la lactancia son muy reales e increíblemente comunes. Entonces, ¿por qué las madres se sienten así? ¿Cómo podemos mejorar la situación de las madres que tienen estas preocupaciones, problemas y ansiedades?

Todo se reduce al apoyo adecuado.

Si no te sientes apoyada por los que te rodean, tendrás que buscarlo y abogar por ti misma. No deberías estar sentada en casa con tu bebé sufriendo en silencio.

Las mujeres nunca debieron criar a sus hijos solas. Estaban rodeadas de otras mujeres que las guiaban y las apoyaban desde el principio. Por desgracia, la vida occidental moderna ha cambiado todo eso.

Sin embargo, la aldea de las madres ya no es lo que era, pero sigue estando ahí. Ahora es tu matrona, tu obstetra, tu enfermera de salud materno-infantil, tu asesora de lactancia, los grupos de apoyo a la lactancia y los recursos de crianza basados en la evidencia, como Newborn Baby.

Así que, para ayudar a otras madres que también lo están pasando mal, puedes empezar por hablar de tu experiencia y normalizar las complejidades y emociones que se entremezclan con la lactancia.

Comprende que la lactancia es natural, pero también puede ser difícil. Esto no significa que tengas que dejar de hacerlo si no quieres. Siempre existe la opción de hacer una pausa en la lactancia. Lee sobre esto aquí junto con nuestros pasos para empezar a extraer leche sin preocuparte por tu suministro. De este modo, otra persona puede encargarse de las tomas de vez en cuando. Incluso es posible que prefieras extraer exclusivamente leche.

No te demores, mamá. Busca la ayuda que necesitas hoy mismo. El apoyo adecuado te ayudará física, emocional y psicológicamente. También te orientará para dejar de dar el pecho si ese es tu deseo. No es algo que se pueda hacer fácilmente sola, así que es crucial tener a alguien que te acompañe en cada paso del camino.

Sé amable contigo mismo. Este es un mantra que te ayudará a replantear algunos de esos pensamientos negativos:

Mi bebé y yo estamos aprendiendo juntos. No estoy fallando.

Dónde obtener ayuda hoy

• Únete a la Asociación Australiana de Lactancia Materna. La ABA cuenta con grupos de apoyo locales, además de reuniones virtuales y online. Los grupos locales están atendidos por asesores o educadores en lactancia materna voluntarios y formados. Encontrarás a otras mamás que pasan por lo mismo que tú, y algunas que se enfrentan a otros retos. Pronto descubrirás que estás progresando cuando puedas ofrecer apoyo a otra mamá que tiene las mismas preocupaciones que tú cuando te uniste por primera vez.
• Únete a los grupos de apoyo a la lactancia materna en Facebook, como nuestro grupo de mamás que amamantan a bebés recién nacidos, para hacer preguntas, compartir tus experiencias y ofrecer tus propios consejos en un entorno confidencial y sin juicios. También podemos publicar tu pregunta por ti (de forma anónima si lo prefieres) en nuestra página.
• Encuentra un IBCLC. El apoyo de otros padres, amigos y familiares puede ser maravilloso, pero hay veces que necesitas a un profesional que te ayude a reconocer la causa del problema. Una asesora de lactancia te apoyará emocionalmente y detectará cualquier problema de lactancia. Lee aquí cómo puede ayudarte una asesora de lactancia. Para encontrar una, pregunta a tu enfermera de salud materno-infantil, a la Asociación Australiana de Lactancia o a las Consultoras de Lactancia de Australia y Nueva Zelanda.
• Amamantar no es sólo alimentar a tu bebé. Alimentar para dormir es normal y saludable. Amamantar para estar cómodo es normal y saludable. Si tus problemas se centran en el sueño de tu bebé y la lactancia, busca la ayuda de un especialista en sueño cuyo enfoque se base en el apego, la neurociencia y la crianza responsiva (como nuestro experto en sueño infantil).