Cuentos clásicos para trabajar las emociones con los niños
La educación de los hijos va mucho más allá de la transmisión de conocimiento o de que aprendan a leer, contar y escribir. Ya vimos anteriormente los juegos educativos para niños que podían ayudarnos a trabajar las emociones, vemos a continuación algunos títulos de cuentos clásicos que también te ayudarán a trabajar los sentimientos con los niños.
La alegría, la emoción o la tristeza
Cuentos clásicos para niños sobre los papás
Cuentos clásicos para niños sobre los abuelos
Está presente en muchos cuentos. Son sentimientos muy unidos a la infancia. Si quieres que tus peques aprendan a diferenciar estas emociones el cuento “La Ciudad sin Colores” es una gran elección para que entiendan la importancia de estos sentimientos.
Miedo, inseguridad
El miedo a crecer es un claro reflejo de inseguridad. En ocasiones, aunque no lo hagamos de forma consciente, somos los propios padres quienes fomentamos este sentimiento, transmitiéndoles nuestras propias preocupaciones, aunque son emociones muy comunes entre los peques de la casa. Utiliza el cuento clásico de Peter Pan para explicarles qué es lo que sucede y las razones por las que se suele sentir miedo o inseguridad. Suele ser un sentimiento que se da especialmente entre los niños más perfeccionistas que temen equivocarse y decepcionar a los demás, sobre todo, a sus padres. También se da entre los peques más tímidos.
Leerles cuentos clásicos para trabajar las emociones puede ser una gran herramienta para que adquieran más confianza en sí mismos y mayor autoestima. Otra parte fundamental es la comunicación. Enseñarles a hablar de cómo se sienten, de qué tal han pasado el día, etc es la mejor manera de mostrarles seguridad.
La educación emocional debe formar parte de la educación de nuestros hijos. Enseñarles a reconocer los sentimientos, hablar de ellos y saber gestionarlos es muy importante en su desarrollo. Los cuentos clásicos para niños pueden ser una gran herramienta para trabajar las emociones.