Ropa para niños: cómo cuidar sus prendas
La ropa para los niños es la que más lavados recibe. Cuando no es una mancha de chocolate, es de sandía, arena, leche, boli… A veces, les cambiamos dos o tres veces al día, por eso resulta de vital importancia saber cómo cuidar de sus prendas. Te contamos algunos consejos.
- Elegir el detergente más adecuado es fundamental. No todos los productos son iguales, ni por supuesto, los precios. Pero lo que debe primar en tu decisión es que sea capaz de quitar las manchas, proteger las fibras y colores, y no dañar la piel de tu bebé. De hecho, este tipo de productos siempre suele ser específico para prendas delicadas.
- Lavar la ropa del revés es una forma de protegerla del roce con otras prendas en el tambor y evitar de esta manera su desgaste, especialmente, si tenemos en cuenta que se lava muchas veces. Además, podrás comprobar todos los tesoros que tus hijos esconden en sus bolsillos como bolis, chicles, pañuelos, horquillas… y que también pueden dañar las prendas.
- Mucho cuidado con los botones y los velcros. Intenta cerrarlos antes de meter la ropa en la lavadora porque pueden destrozarte camisas, pantalones, baberos… Otra opción es lavarlas en las bolsas específicas que venden para prendas delicadas.
- Utiliza siempre agua fría para cada lavado, así evitarás que la ropa encoja o se destiña.
- Tiende la ropa del revés, el sol no se comerá el color ni afectará a la calidad o durabilidad del tejido.
La ropa para los niños se ensucia con mucha facilidad. Son tejidos que se resienten enseguida con los lavados, por eso elegir un buen detergente es esencial para cuidar de sus prendas y que te duren más tiempo. Muchas mamás prefieren lavar toda la ropa de sus hijos antes de usarla cuando son recién nacidos, sobre todo, las prendas que van a entrar en contacto directo con su piel como los bodies. Aunque hay diversas teorías al respecto, es decisión tuya hacerlo o no.