Calzado para niños: zapatos para sus primeros pasos

Los primeros pasos en un bebé suponen una gran conquista. Cuando llega este momento en la etapa del desarrollo, elegid el calzado para niños, concretamente los zapatos para sus primeros pasos, es una gran responsabilidad. Te contamos los aspectos fundamentales que debes tener en cuenta.

Material

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Los materiales más usados en la fabricación de calzado para niños son la tela, el cuero y el plástico. Éste último es el menos recomendable ya que no permite la transpiración. En este sentido, el mejor material es la tela, además de ser también el más flexible. El cuero, aunque es mucho más resistente tiene la desventaja de que para curtirlo se utilizan sustancias químicas muy agresivas que pueden resultar irritantes para los peques.

La suela

Esta parte de los zapatos para sus primeros pasos es fundamental. Tanto es así que, en función del tipo de calzado, la suela tiene unas determinadas características. No es igual la de unas botas que unas chanclas, por ejemplo, o la suela de unos zapatos que la de unas sandalias.  Debe proteger el pie del peque sin limitar el movimiento natural, por eso tiene que ser flexible y con al menos medio centímetro de grosor.

Altura

En este sentido existen discrepancias. Algunos especialistas recomiendan que los niños utilicen botas que protejan el tobillo para que no se tuerza y evitar así el pie plano, pero la realidad es que hasta los 3 años no se forma el arco del pie por lo que no tienen ningún sentido limitar la movilidad de una articulación. Además, el pie plano responde más a factores genéticos que al utilizar un tipo de zapato u otro.

Horma

Es donde más errores se producen en la fabricación, pues muchos diseñadores de calzado para niños, simplemente reducen la horma de un zapato para adultos, cuando sus necesidades no son las mismas. Los zapatos para sus primeros pasos no deben tener arco en la horma, pues tal y como hemos comentado antes, no es hasta aproximadamente los 3 años cuando se forma el arco del pie.