Ejercicios para niños: ejercicios para estimular la atención temprana de 1 a 2 años

La estimulación o atención temprana tiene como objetivo fundamental contribuir al desarrollo motor, social y cognitivo de los peques y, por lo tanto, a fomentar su autonomía e independencia. Te contamos a continuación los ejercicios para niños que puedes llevar a cabo si tus hijos tienen entre 1 y 2 años.

Motricidad gruesa

Ejercicios para niños: ejercicios para estimular la atención temprana de 2 a 3 años

Ejercicios para niños: ejercicios para estimular la atención temprana de 3 a 4 años

Para trabajar el equilibrio, sostén a tu hijo por las axilas e inclínalo hacia los lados, hacia atrás, hacia adelante, dejando que se enderece él solo.

Motricidad fina

Facilítale hojas y pinturas de colores para que pueda expresarse libremente. Otro ejercicio para niños que puedes practicar es dejarle cualquier revista que ya no vayas a utilizar o papel y que lo rompa.

Social

Si quieres trabajar la percepción, pon a su alcance diferentes texturas: telas, papel film, papel albal, papel de seda, lana, cartón… En definitiva, cualquier cosa que se te ocurra para que experimente y descubra nuevas texturas.

Lenguaje

Para favorecer el proceso de identidad, repite con él las partes del cuerpo. Invítale a que también señale las tuyas. Cántale canciones sobre el tema que también le expliquen lo que se hace con cada una de ellas.

Cognitivo

Permítele que te observe e imite con actividades diarias que tú realizas como lavarte los dientes, peinarte, enjabonarte las manos antes de comer…. El mejor ejercicio para los niños es repetir lo que ven, es su forma de aprendizaje durante una gran etapa de su vida.

Recuerda que más importante que cualquier ejercicio para niños, la mejor forma de estimulación, especialmente cuando son pequeños, es felicitarles cuando realizan algún esfuerzo, aunque no hayan conseguido los objetivos que te proponías. La motivación es necesaria en los procesos de aprendizaje ya que, sin motivación, es muy posible que pierdan el interés por cualquier actividad que estén realizando. Lo mismo ocurre cuando son más mayores y comienzan con los deberes y las horas de estudio.