Christina Perri dio a luz a una niña muerta llamada Rosie en 2020. En ese momento, Carmella, la hija de Perri, tenía solo 2 años.
Carmella tiene ahora 5 años y algunas preguntas difíciles para su madre.
"Carmella finalmente me preguntó dónde fue el cuerpo de Rosie cuando murió", comenzó la cantante de "A Thousand Years" un post de Instagram el 27 de abril. "Sabía que llegaría a ello, sabía que su cerebro conectaría los puntos algún día y se daría cuenta de que nunca hablamos de ello".
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Perri recordó cómo se quedó "helada" cuando Carmella le preguntó qué había pasado con el cadáver de su difunta hermana.
"En mi cabeza decía: 'Miente, miente, miente'. En mi corazón dije: 'Dile la verdad'", escribió Perri. "Fuera de mi boca dije: 'Oh Carmella, lo siento, creo que debería esperar a que seas mayor para decírtelo'".
En ese momento, Carmella empezó a llorar. Quería respuestas.
"Estaba desolada, con lágrimas instantáneas cayéndole por la cara", escribió Perri.
Mientras cogía de la mano a Carmella, Perri "explicaba con suavidad y sencillez los hechos".
"Surgió tanta pena y dolor", escribió Perri. "Gritaba: '¿Por qué no está aquí con nosotros? ¡No quiero que esté muerta! No quiero que esté muerta'".
Perri dijo que "calmó" y "consoló" a Carmella y le dijo todo lo que pudo para "ayudarla a entender y ayudarla a aceptar lo inaceptable."
Esa misma noche, Carmella le preguntó si podía sostener la caja de cremación de Rosie.
La cantante Christina Perri y la caja de cremación de su hija nacida muerta. Getty Images, @christinaperri vía Instagram
"De alguna manera encontró algo de alegría. Le encantó el color y la escritura y preguntó por su nombre y dijo que era 'preciosa', y preguntó si podía guardarla en su habitación y tenerla cerca de ella para siempre", escribió Perri.
"Compartir el dolor con otros niños es muy, muy duro, pero muy importante. Mi hijo siente mucha empatía hacia los demás al haber pasado por la angustia con nosotros", escribió una persona en los comentarios.
Otro añadió: "Gracias por compartir aquí la historia de sus hijas con tanta valentía. No solo me ha hecho llorar como madre perdida que soy, sino que está rompiendo el estigma de hablar de nuestros hijos que han muerto."
En enero de 2020, Perri sufrió un aborto a las 11 semanas y en noviembre de ese mismo año perdió a Rosie. Más tarde, Perri se enteró de que tenía un trastorno de coagulación de la sangre que podría haber causado las pérdidas de sus embarazos. Concluyó su publicación instando a las mujeres a someterse a pruebas para detectar trastornos de la coagulación sanguínea.
El 22 de octubre, Perri y su marido, Paul Costabile, dieron la bienvenida a una niña llamada Pixie Rose. "¡Ya está aquí!". escribió entonces Perri en Instagram. "Con mucha fe, confianza y polvo de hadas ha llegado sana y salva. Por favor, dad la bienvenida a nuestra mágica niña doble arco iris".